Mi peque, de 6 años, todavía no pronuncia bien el fonema de la /r/, más bien, la /rr/ vibrante.
No le hemos dado mucha importancia hasta ahora, que el mocete tiene mucho amor propio, y a la hora de escribir, no distingue bien, y entonces, en vez de poner por ejemplo: “pizarra”, pues pone: “pizara”, y se cabrea mucho.
Cuando tenía 4 años, lo vio la logopeda del cole, y entonces ya le enseñó a pronunciar la /ch/ en un día.
Fundamental amigos, marcar la página. Muchas veces me quedo dormida con el libro encima, pero siempre tengo el marca páginas a punto.
Y también he acostumbrado a mis hijos a lo mismo. No se cuántos marca páginas tenemos, parece que se los comen, desaparecen y luego te los encuentras en el momento y lugar más inesperado.
Estos marca páginas fueron para unos amigos de mi chico grande….
Bueno, no tan nuevas, que ya llevamos unos añitos con el tema, y en los “chinos”, que cada vez que entras en éstas épocas, te meten las calabazas, disfraces y complementos varios por los ojos,
A mis chicos les encanta este día, sobre todo al peque, que lo vive a tope; luego se caga…..
En la clase del peque tienen una mascota, se llama Rasi, de La Pandilla de la Ardilla.
Antes teníamos a Pupi, pero ahora, al cambiar la ley y los libros, pues tenemos una nueva mascota.
Y otra muela de leche que toca empastar al peque, ya va la segunda… El mayor lleva una y es carne de cañón para llevar aparato porque tiene el paladar hacia arriba (ojival….).
En el colegio de mis peques nos han dado unas Técnicas deestudio, orientaciones y consejos.
Se ve que a partir de 3º de primaria la cosa se pone seria, y hay que “hincar el codo”. En infantil y los dos primeros cursos de primaria han ido más relajados, y ahora dan el salto.
Y aquí tenemos una ayudita, para echarles una mano.
En casa tenemos los cumpleaños acumulados por estas fechas, jejejeje.
Ahora le toca a mi chico grande, que mañana cumple 8 añazos, 8 años ya que hace que soy mamá, algo que siempre, desde niña, tenía claro, quería ser MAMÁ.
Y mi chico grande hizo que se cumpliera ese sueño, que me hiciera el gran regalo de ser madre.
Los tres primeros días de septiembre hemos estado en Madrid. No habían ido nunca los peques y tenían muchas ganas, sobre todo de ir al Parque de la Warner.
Fuimos a elegir los días más calurosos, pero lo pasamos muy muy bien, muy aprovechaditos.
Este año no me apetecía nada de nada liarme a forrar tropecientos libros: tijeras, celo, dolor de espalda, sudores de la muerte…..
Todo esto a contrarreloj, porque en el cole de mis hijos hay que llevarlos sin forrar el primer día, para comprobarlos y que no haya errores, y esa tarde, pegarte la matada forrando, porque hay que llevarlos la mañana siguiente.
El día 9 de septiembre empiezan mis churumbeles el cole, y todavía me queda algo que comprarles, y algo que se me olvidará y se me quedará cara de pardilla el primer día de clase.
Desde junio ya sabemos lo que hay que comprarles, pero no se cómo lo hago, que siempre me faltan días.
A veces tienen tantas cosas, que no les da la vida, hasta se aburren!. A mi me parece tremendo que me digan eso, que se aburren, y miro en mi salón, que es un auténtico chiquipark, y se me cae el alma al suelo.
¿Qué os aburrís?. Yo no tenía casi juguetes, pero eso si, vivía en un pueblo, y estábamos todo el día en la calle. Cosa que estos hijos míos no hacen en la ciudad (pero sí cuando van al pueblo en fiestas!).
El otro día me llevé el gran susto. Se “suponía”, que mis churumbeles estaban durmiendo la siesta, y yo estaba tan tranquila viendo la tele en el salón.
De repente, oigo un ruido fuerte yse va la luz de toda la casa, no se ni lo que se me pasó por la cabeza, pero me levanté como un rayo del sofá y fui a ver a mis chicos.
Todo a oscuras, y yo preguntando a gritos si estaban bien….
Pasa la vida, pasa la viiiiiiida!!, y yo tan contenta. No me asusta cumplir años, por ahora.
Siempre digo que eso quiere decir que estoy viva, pero no se si os pasará a vosotros, pero a mi cada vez me da la sensación de que pasa el tiempo más rápido, que sin darme cuenta, he llegado casi a la cuarentena .
Cuando son bebes, si lloran, si se cagan, si quieren teta…Cuando van creciendo, desde el minuto cero preguntan :¿cuándo llegamos, cuándo llegamos….?, que parecen discos rallados.
Yo entiendo que se aburren, y algo tenemos que hacer para entretenerlos y que el viaje sea seguro.
Por mi, que fueran dormidos todo el rato, sería lo ideal, jijijiji.
Este mal tiempo en el comienzo de verano, el chiquitillo con los pitidos en el pecho, que se retrasa el ponerle la vacuna y estamos pendientes del cuándo, que no podemos salir ni a la piscina para que el niño no se enfríe, que, que, que….
Y ya, por fín, le han podido vacunar!, y yo siento un alivio que ni os imagináis.
Nos hemos introducido en el mundo del patinaje, bueno, yo de pequeña patinaba, me encantaba, pero después de tantos años, era como un “volver a empezar”.
Como soy una mamá muy animada, me he liado la manta, y yo también me he puesto los patines!.
Ayer fue un día de grandes emociones, mi chiquitillo se ha hecho un mozo, y ya no es aquel niño, que hace tres años comenzó el cole, con ilusión y algo asustado…
Ayer fue el gran día de la graduación, el final de su etapa de infantil, una gran fiesta!.
Y aquí estamos, bailando al son de las peonzas, que después del último grito con las pulseras de gomas, que parecía que no había otra cosa en el mundo, y que no iba a haber un mañana con tantas pulseras de colores…..pues que ahora nos atacan las peonzas.
Si, nos atacan, porque ya corremos peligro en el parque con tropezarnos con ellas y “esmorrarnos” de pleno!!!.
Hay de todos los tipos, colores y materiales, y mil maneras de bailarlas…..
Pobre “Chucho guau”, con cara de pena se nos ha quedado el peluche del chiquitillo…
Después de la operación rescate del trastero, “Chucho guau” había vuelto a nuestro hogar.
No tengo muchos peluches por casa, por el tema de la alergia a los ácaros, así que de vez en cuando, hacemos cambios, subimos unos y bajamos otros, y nuevamente se ilusionan y emocionan.
Me pasa como con los calcetines, que la lavadora se los come, o qué se yo!.
Con los botones de las batas del cole, también es todo un misterio, porque después de bien lavaditas las batas, en el momento que voy a plancharlas, a última hora del domingo, es cuando me doy cuenta de que falta algún botón.
Y a esas horas, a buscar botón de repuesto y coserlo .
Pues no sabemos de que son las semillas, pero esperemos que salga algo, porque con la mala mano que tengo yo para las plantas, no tengo muy claro yo que esto vaya a llegar a buen puerto.
Mi chico grande fue de excursión a una huerta, y allí les regalaron las semillas. No les dijeron de qué eran, así que esto es todo un misterio para nosotros.
Hasta que no germine y crezca la “plantita” no sabremos nada, si sale ;P
Pues no, no es una película, es un virus, primo hermano de la varicela, escarlatina, sarampión, rubeola y roseola.
Recibe el nombre de ‘quinta enfermedad’ por el orden en el que fue descrita dentro de las enfermedades exantemáticas de la infancia (es decir, las que producen sarpullido en la piel y fiebre).
Está rulando por el colegio, y cómo no, mis peques se lo traen todo a casa ;P
Pues si, así es como mejor se comen el pescado mis hijos, que me cuesta horrores.
Les compro una cola de merluza, la congelo, por el tema del anisaki y procuro mirar y remirar si tiene espinas y quitárselas, que algún sustito nos hemos dado por las jodías espinas.
Mis chicos están como locos!. Cuando les dije que íbamos a participar en la campaña de Actívate, y que nos iban a mandar las chocolatinas, no cabían en si.
Han estado esperando las chocolatinas como agua de mayo, y pensando qué actividad elegir. 1 tableta = 1 actividad.
Llegó el paquete mientras estaban en el cole, y esperé.
Parapapaaaaa, parapapaaaaaa, parapapa pa pa paaaa.
Me resuena la canción en la cabecita, el sol me activa y me pone contenta, así que esta vez si, señoras y señores, es el momento de un DIY como Dios manda, porque los papás se lo merecen.
Por lo menos yo no me puedo quejar, el mío y el padre de mis criaturas son lo más!!!, que voy a decir yo .